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viernes, 21 de septiembre de 2012

Feliz cumpleaños, Maestro




Cómo olvidar esa tarde de agosto de 2001…

Por ese entonces había adquirido la costumbre de observar detalladamente las bibliotecas ajenas. Mi pasión por la lectura se incrementaba cada día, y cada vez que iba a una casa y veía alguna, me acercaba y miraba los volúmenes con curiosidad. Entonces, en una ocasión, al ir a pasar la tarde en la casa de un amigo, y al ver la amplia biblioteca de su familia, me acerqué intrigado…

Y vi el libro.

Decía La Hora del Vampiro, de un tal Stephen King. El nombre ya me sonaba: hacía algunos meses había visto en una librería una novela titulada La Danza de la Muerte. Era la excelente edición de la colección Éxitos de Plaza & Janés. Recuerdo que, sin un centavo en el bolsillo, solo pude mirar la atractiva sinopsis con triste ansiedad. No obstante, el nombre me quedó sonando (en ese momento no sabía que un endemoniado payaso que me había aterrorizado muchos años antes era de su creación). Y cuando lo vi en la biblioteca de mi amigo, todas las alarmas se encendieron.

Pedí prestado el libro y lo devoré en ocho o diez días… ¡y me enamoré! :D

El libro me atrapó de tal forma que, ya con el nombre del autor grabado a fuego en mi cabeza, fui de inmediato a la biblioteca que solía frecuentar. Había varios títulos en el catálogo, y en los próximos dos meses leí Cementerio de Animales, La Zona Muerta y Un Saco de Huesos…

Algunos meses después leí los dos primeros tomos de La Torre Oscura, La Danza de la Muerte, Cujo… y el resto es historia…




Hoy en día mi colección asciende a 128 libros, tengo toda su obra publicada en castellano y, exceptuando un ensayo sobre el triunfo de los Red Sox en las series mundiales de 2004 y algunos relatos inéditos, he leído prácticamente todo. Y no me canso de sus historias. Sus relatos me han proporcionado tantos instantes inolvidables, me han generado tantos sentimientos y sensaciones, han aliviado tantos momentos de preocupación y tristeza, que en el día de su cumpleaños solo puedo decirle “GRACIAS” a este inigualable escritor a quien el mote de “Maestro del Terror” le queda corto.

Aparte de ser el genio creador de un universo de historias que me han acompañado por años, y que directa o indirectamente han permitido que conozca y estreche fuertes lazos de amistad con personas que viven a miles de kilómetros de distancia, y a los que ahora aprecio profundamente, Stephen King es una persona digna de admiración, cariño y respeto. Un gran hombre, con todas las letras.

Único y sin igual, así es el Maestro. Muchas gracias por todo, Tío Steve.

Quiera el Destino que vivas al menos otros 65 años y nos sigas otorgando tantos momentos inolvidables. :)


¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS, STEVE!!!




:)


miércoles, 19 de septiembre de 2012

Un completo Escalofrío





El pasado jueves, después de una cacería de diez meses, completé finalmente la colección Escalofríos, de R.L. Stine, publicada en América Latina por la editorial Norma.

Como ya contara en otras entradas dedicadas a este “escalofriante tema”, la colección original en inglés constaba de unos 60 números, y en España se publicó la totalidad con el título de Pesadillas. Pero en Latinoamérica la editorial Norma publicó, según lo que he logrado averiguar, solo un total de 45 números. Así lo demuestra la lista publicada al final del artículo dedicado a la colección en Wikipedia.

Pues bien, después de una fiebre que comenzó con una entrada publicada por mi amigo Luther en su blog Friki Mortis, y que me hizo recordar los grandes momentos pasados con estas historias cuando era un crío, me di a la búsqueda de estos números con no poco entusiasmo, llevado tanto por mi amor por la literatura como por mi afán coleccionista, consiguiendo en sucesivas cacerías una buena cantidad de títulos, algunos de los cuales nunca había visto…

Poco a poco conseguirlos se hizo más difícil, y solo una reciente visita a Bogotá, en la que conseguí 8 de los 9 títulos que me faltaban, me acercó más que nunca a la meta.

Pero el último libro que me faltaba, El Fantasma Sin Cabeza, pareció decidir esconderse y se hizo esquivo en todas mis pesquisas.




Entonces, hace poco, Luther, justamente el culpable de que me picara el “escalofriante” bicho, y en una especie de justicia divina, me envió un mensaje al Face que decía: “No busques más El Fantasma Sin Cabeza. Solo diré eso”. Y, en efecto, el pasado jueves, junto con unos cuantos números de la nueva revista de literatura popular El Tintazo (de la cual ya hablaré en una próxima entrada), me llegó el tan anhelado volumen, cortesía de mi amigo y colega escritolero Mauricio Vargas (Luther).

Desde aquí le envío una vez más mi agradecimiento por semejante regalo. ;)

Y bueno, aquí está finalmente la colección completa de la mítica serie de R.L. Stine:



Es realmente genial como lucen, con ese colorido y esas geniales portadas ilustradas por el gran Tim Jacobus.

Aquí van en series de quince para poder observarlos con más detalle:

Del número 1 al 15:




Del número 16 al 30:




Del número 31 al 45:




Ahora queda seguir disfrutándolos poco a poco, en orden, como he venido haciéndolo, intercalándolos con otras lecturas más “espesas”.

Apenas he leído los dos primeros en esta nueva y “escalofriante” etapa (de crío leí solo 5 de los 45 que componen la colección), y he descubierto que poco importa que estén orientados a un público infantil-juvenil, y que su prosa sea sencilla y por momentos predecible; en realidad se disfrutan mucho, las historias te atrapan, te sorprenden, y te sientes transportado a esa lejana y mágica infancia en la que estos libros de verdad lograban causarte…

Escalofríos. :)

;) 

domingo, 16 de septiembre de 2012

Fiesta del Libro y la Cultura Medellín 2012


Hoy culmina la Fiesta del Libro y la Cultura 2012 en la ciudad de Medellín, tras diez días en los que la literatura, el teatro, la música y el arte en general se dieron cita en el maravilloso Jardín Botánico de Medellín.

Y es que en los últimos años, y después de mucho tiempo celebrándose en el Palacio de Exposiciones, la Alcaldía de Medellín decidió cambiarle el nombre al evento, denominándolo “Fiesta” en lugar de “Feria”, y trasladarlo al Jardín Botánico Joaquín Antonio Uribe, un jardín de 14 hectáreas de extensión, de enorme riqueza florística y que alberga más de 1.000 especies vivas.

Pese a que durante muchos años el lugar no fue objeto de suficientes cuidados por parte de la administración, dada la importancia que han adquirido los recursos naturales y la ecología, hoy día se encuentra perfectamente renovado y modernizado, forma parte del conjunto de equipamientos urbanos de la zona norte de Medellín junto con el Parque Norte, el Planetario, el Parque Explora y el Parque de los Deseos, y es así como ha llegado a convertirse, de un pequeño lugar que fuese en el siglo XIX, en uno de los más bellos sitios de Antioquia, el país y el mundo dedicados a la botánica.

Sus colecciones de especies, y especialmente de flores, son destacadas en el país y meca de la flor nacional de Colombia, la orquídea.

Pues bien, qué mejor lugar que este para celebrar la Fiesta del Libro. Ver la naturaleza y la cultura dándose cita en un lugar tan maravilloso es algo indescriptible.


Vista aérea del Jardín Botánico

He tenido el placer de asistir a los últimos tres eventos, y cada vez quedas con la sensación de que no viste lo suficiente y de que habría sido genial ir cada tarde a sentarse en un prado o en algún banco de madera ubicado en uno de los tantos caminos que recorren el Jardín a disfrutar de un buen libro, arrullado por el chirrido de los insectos, el trinar de las aves y el susurro de las ramas de los árboles mecidas por el viento…






Pero bueno, hay que trabajar (tomo nota mental para seguir solicitando las vacaciones en septiembre), y no queda otra que conformarse con el par de días que tuve el placer de asistir.

Esta vez estuve el pasado domingo 9 y en la noche de ayer, 15 de septiembre. Y el balance adquisitorio ha sido mucho mejor de lo que esperaba (a pesar de que no ha caído nada de Stephen King, mi autor de cabecera). Me he topado con muy buenas ofertas, y alguna que otra curiosidad.


El Orquideorama, la maravilla arquitectónica bajo la cual
se hospedan gran parte de los expositores

En un día cualquiera

En la Fiesta del Libro



Sin más preámbulos, démosle un repaso a mi preciado botín literario. :D

Lo más sorpresivo, quizá, fue encontrar dos tomos de la saga Dune, de Frank Herbert (en este caso dos de los libros escritos por su hijo Brian en compañía de Kevin Anderson), en tapa dura con sobrecubierta, a un precio irrisorio. El primero, La Cruzada de las Máquinas, lo encontré por solo 10 dls., pero por si eso no fuera genial, al final resultó que una amiga de la editorial me lo regaló como una especie de pago por la ayuda que le he prestado en algunas ocasiones con trabajos de cotizaciones y cosas por el estilo. Después, en la noche de ayer, me encontré con otro libro de la saga, en este caso Cazadores de Dune, el comienzo del famoso Dune 7, a un increíble precio de 2 dls. Sí, leyeron bien, ¡2 dólares! Resultó que habían tres ejemplares del mismo libro, y terminé echándolos todos al saco para futuras negociaciones (o regalos, quién sabe)… :P




Otro par de libros que me dejaron muy satisfecho, y a los que no veo la hora de hincarles el diente, fueron dos del Príncipe del Terror, Joe Hill. Nada más que la antología Fantasmas, que había buscado por años sin ningún resultado, y Cuernos. Ambos por 8 y 5 dólares respectivamente, y completamente nuevos. :)




A muy buen precio encontré también dos libros de Arturo Pérez–Reverte, un autor que no he leído, pero del que he visto muy buenas críticas. Lo que compré fue una adaptación al cómic del primer libro de las Aventuras del Capitán Alatriste, y su continuación, en prosa, Limpieza de Sangre. Ambos se ven buenísimos.




Dos más: Domingo Negro, de Thomas Harris, y El Último Don, de Mario Puzo. He leído la saga de Hannibal Lecter del primero, y El Padrino del segundo, así que espero que estos sean igualmente buenos. Con Domingo Negro, por cierto, completo la colección de Harris, compuesta por la impresionante cifra de… 5 libros… :P




La Llave de Plata, de H.P. Lovecraft, que incluye varios relatos del ciclo de Randolph Carter, unos de los pocos que no he leído, y un curioso libro ilustrado a todo color titulado Dragones del Mundo, que incluye un repaso a los diferentes tipos de dragones a lo largo de la historia literaria y cultural de los últimos siglos.




Casi antes de volver a casa, me topé con esta joya del gran George R.R. Martin, Los Viajes de Tuf. Cualquier libro de Martin que no pertenezca a la saga de Canción de Hielo y Fuego parece ser harto difícil de conseguir, así que no lo pensé dos veces para echarle el guante a este por solo 5 dls. (…aunque luego lo vi por 3… :( ). Es un libro de ciencia ficción y ya desde el comienzo se ve brutal.




Por cierto, los de Random me obsequiaron un total de 5 separadores alusivos a la última entrega de la saga de Martin, Danza de Dragones.




Para finalizar, y justo al lado de la salida del Jardín Botánico, me topé con un puesto que anunciaba los libros más pequeños del mundo. Me acerqué sin esperar gran cosa, y en efecto muchos de los títulos no eran nada grandioso. Nombres como El Significado de los Sueños, Frases Célebres o cosas por el estilo daban muestra de los temas tratados. Sin embargo, un pequeño libro titulado Cuentos de Terror llamó mi atención. Lo cogí, esperando cuentos infantiles o fábulas de misterio, y vaya sorpresa me encontré al ver un libro bellamente ilustrado que contenía algunos de los grandes clásicos de la literatura de terror. Títulos como El Entierro Prematuro, El Gato Negro, Vampirismo, La Pata del Mono, El Horror de Salem, entre otros, hicieron que no dudara en coronar la jornada con ese pequeño gran volumen:




He aquí algunas de las ilustraciones:








 Sorprendentemente, el libro tiene más de 430 páginas:




Helo aquí junto a Cazadores de Dune, en una imagen que da una idea de su tamaño:




Hubo mucho más, como siempre.

Me encontré un ejemplar de Todo Oscuro, Sin Estrellas en inglés; algunos paquetes de lujo con todos los tomos, en inglés también, de Canción de Hielo y Fuego; esa maravillosa edición ilustrada y en un solo tomo de El Señor de los Anillos que parece que nunca voy a tener; algunos cómics de La Torre Oscura y dos de los tomos en tapa dura de Apocalipsis, que me deprimieron por unos minutos; y una serie de libros de la editorial Valdemar que me dejaron sin aliento y que casi despiertan al desconocido cleptómano que habita en mí… :P Con el permiso de uno de los dependientes, pude tomarle una foto a estos tres títulos alucinantes:




Para finalizar, he aquí una foto que resume las adquisiciones conseguidas en las dos jornadas que estuve en la Fiesta del Libro:




Como detalle curioso, cuando esperaba el vagón del Metro que me llevaría al Jardín Botánico, me encontré una chica sosteniendo un libro de Stephen King en sus manos. No pude evitar acercármele y preguntarle, y resultó ser nada más que una edición original de The Shinning, con esa portada legendaria que todos los FriKings conocen. Pude sostenerlo unos momentos en mis manos, mientras me contaba que pertenecía a una biblioteca que ahora no recuerdo, pero no pude cerciorarme si se trataba de una primera edición…

Y bueno, solo queda esperar con ansias a que llegue septiembre de 2013, que me encuentre aún dando guerra  por estos lares y que, en lo posible, cuente con un capital mucho mayor para poder comprar alguna de esas joyas de Valdemar, entre otras…

Por ahora, espero encontrar el tiempo para ponerme al día con la lectura, a la que debido a diversas causas tengo muy abandonada… :/

El tiempo, como siempre, maldito desgraciado… ¬¬

¡Hasta la próxima!

;)